fútbol base

¿Cómo funciona el fútbol base en España?

Artículos de la categoría:

El fútbol base, como bien indica su nombre, es el cimiento de la gran pirámide que tiene en su cúspide al fútbol profesional. Sin una buena preparación no tendríamos el gran espectáculo que podemos ver hoy en día por la televisión. Las categorías inferiores son la esencia del deporte rey.

Estas categorías están bien diferenciadas, desde un nivel de iniciación para los más pequeños hasta un nivel muy competitivo como es la categoría juvenil, la antesala del fútbol profesional. En España abarca hasta los 19 años, pero en países como México se extiende hasta los 23, recibiendo el nombre de fuerzas básicas.

El fútbol base no solo sirve para el crecimiento y desarrollo de jugadores, sino de entrenadores, preparadores e incluso árbitros, que dan sus primeros pasos y les sirve como gran experiencia a la hora de afrontar futuros desafíos.

Además, dentro de cada categoría existen divisiones federadas, en las que los clubes pueden inscribirse. Esto es algo muy útil para introducir el gen competitivo y el poder luchar por objetivos dentro de una clasificación, como ascensos, evitar descensos o ganar el campeonato.

Iniciación

Los primeros pasos se dan en escuelas de fútbol, que tienen equipos específicos para cualquier edad. En ellas se empieza a trabajar la coordinación psicomotriz y el contacto con el balón desde los cuatro años hasta los cinco, e incluso en algunas escuelas desde los tres años.

Los campos son pequeños, y no juegan once jugadores, sino siete, en el conocido como fútbol siete. También los tiempos son más cortos, situándose entre 20 y 30 minutos por cada tiempo.

En esta fase podemos encontrar cuatro categorías, en las que también los entrenadores tienen su primera experiencia tras conseguir el Nivel I del curso:

  • Chupetines: Desde los cuatro hasta los cinco años, e incluso desde los tres en algunas escuelas.
  • Prebenjamines: De los seis a los siete años.
  • Benjamines: Abarca los ocho y nueve años.
  • Alevines: De los diez a los once años.

Desarrollo

Con ya las primeras nociones aprendidas, se empieza a trabajar más en la parte táctica y técnica, aportando también las primeras lecciones físicas para el desarrollo de agilidad, fuerza y velocidad. Los tiempos se alargan hasta los 40 minutos por tiempo, y ya se desarrolla el fútbol 11, con campos más grandes.

Los entrenadores empiezan a ser acompañados en los banquillos por preparadores físicos, segundos entrenadores y ayudantes y los porteros empiezan a aprender posicionamiento con entrenadores específicos. En estas dos categorías ya está presente un extenso cuerpo técnico.

  • Infantil: 12-13 años
  • Cadete: 14-15 años

Semiprofesional

La gran antesala del fútbol amateur es la categoría juvenil, y es por ello que es la más extensa, con una duración de tres años.

En ella los jugadores se forman para dar el salto, e incluso muchos de ellos no llegan a terminar esta etapa, ya que los filiales y primeros equipos les empiezan a incluir en convocatorias y a dar minutos. Por ejemplo, Ansu Fati solo disputó un año como juvenil antes de llegar a debutar con el FC Barcelona.

  • Juvenil: 16-19 años

Empieza a aparecer también la figura del agente y representante, muy habitual en las canteras de los grandes equipos. Y, además, los entrenadores necesitan el Nivel II del curso de entrenador para llevar un equipo a nivel territorial, y el Nivel III para hacerlo en la máxima categoría, la División de Honor Juvenil.

¡Suscríbete a nuestra newsletter!

Fútbol profesional – Amateur

Cuando los jugadores finalizan el tercer año de juvenil, deben avanzar hacia el fútbol amateur. Muchos continúan su aprendizaje en filiales, pero la gran mayoría tiene que buscarse la vida en divisiones inferiores como Tercera o regional.

Aquí aparece también la diferencia física, ya que pasan de competir con jugadores de su misma edad a hacerlo con algunos que pueden tener hasta 20 años más. Es por ello que la adaptación es clave para desarrollar posteriormente una carrera.

Eso sí, es importante señalar la dificultad de conseguir llegar al fútbol profesional. Solo un pequeño porcentaje de jugadores lo logra, y no solo interviene la calidad o la forma física, sino que la suerte es también diferencial para tener un hueco en la cúspide de la pirámide.

Comentarios

  1. Alex Martínez : «quiero que esta tradición siga con mis hijos» – MEDIOS DIGITALES

    […] mucho tiempo solo, hablando contigo y comiéndote la cabeza, por lo que me acabé yendo a jugar a fútbol con mis amigos que era dónde mejor me lo pasaba ya que estaba con mis amigos y compartíamos un […]

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

Este sitio usa Akismet para reducir el spam. Aprende cómo se procesan los datos de tus comentarios.